El riesgo de exclusión en los jóvenes y niños ha aumentado en los últimos en los años, por lo que ha sido necesario buscar diferentes terapias para conseguir recuperar la confianza y seguridad de los mismos. En las aulas de los Centros Abiertos de Montcada i Reixac cuentan con un ayudante muy especial Neula, una perrita ciega de una ojo que trabaja con los niños para otorgarles confianza en sí mismos, autocontrol, responsabilidad.
Proyecto Link
Sonia Puentes, una fisiopediatra, es una de las impulsoras del proyecto, cuyo objetivo es mejorar la calidad de vida de los alumnos y sus familias. Todo comenzó cuando estaba tratando en la recuperación de la pierna de un niño. Cansada de forzar al niño a andar, decidió buscar un refuerzo positivo para lograr que la recuperación no conllevará un mal rato para el niño, le pidió que sacará a pasear al perro. Lo que puedo observar es que al invitar al niño a trabajar en beneficio del perro conseguía que trabajase en el suyo propio.
Al ver los resultados tan optimistas, junto con la veterinaria Lola Torres ha diseñado una serie de objetivos para poner en práctica en las aulas de los Centros Abiertos. Además este proyecto va vinculado a la construcción de una nueva perrera proyectada para el 2019, lo implica el traslado de la perrera de Barcelona. La concejal Mar Sempere augura que la reubicación facilitará “una colaboración más estrecha en el trabajo terapéutico y el cuidado de los animales”.
¿Cómo funciona cada sesión ?
Los Centros Abiertos funcionan fuera del horario escolar, organizando actividades lúdicas y dando apoyo a jóvenes y niños en riesgo de exclusión social. Durante las primeras sesiones trabajan el descubrimiento del perro, enseñando a los niños a actuar con el animal y conocer su estado de ánimo, observando el “lenguaje” del perro. Estas sesiones suelen ser un poco abrumadoras ya que los niños se excitan al ver al perro en el aula, pero poco a poco van aprendiendo a interpretar los sentimientos del animal y actuar con serenidad.
Las siguientes sesiones se centran en crear el vínculo de confianza entre los niños y el perro, se realizan diversas actividades, como puede ser la de colocarse todos en fila de pie con las piernas abiertas y el perro tiene que pasar entre ellas sin detenerse, y también se realiza la misma actividad a la inversa, los niños se tumban en suelo en fila y el perro tiene que pasar por encima . Aquí son los alumnos los que tienen que confiar en el perro.
Neula, una experta trabajadora social
Neula es toda una experta en estas sesiones, ya que ha participado en varios proyectos, como terapias con personas mayores, personas con daños cerebrales, personas con multidiscapacidad, niños con autismo y estimulación sensorial de bebés recién nacidos.
Una de las características de Neula, además de su predisposición y buen carácter, es ciega de un ojo, lo que ayuda a incidir en la diversidad y la inclusión, ya que demuestra cómo a pesar de su pequeña discapacidad puede hacer vida totalmente normal.
Otro de los objetivos de este proyecto a demás es prevenir el maltrato y el abandono de animales, ya que en las clases también se tratan temas como los cuidados básicos de un animal y las diferentes exigencias legales, como la implantación del chip o el censo municipal de mascotas.
Primeros Resultados
Los resultados han empezado a florecer, ya que se nota mayor cohesión entre los integrantes del grupo, del mismo modo que los alumnos se ayudan entre sí y trabajan juntos para ayudarse y colaborar, lo que ha permitido tratar problemas emocionales y de conducta.
Como podemos comprobar los animales son verdaderos ayudantes en cualquier etapa y situación de la vida, por ello es necesario cuidarlos y tratarlos como se merecen.
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